Como en cualquier ser vivo, la nutrición es la base de un cuerpo sano y equilibrado. Los gatos, como cualquier otro animal, tienen unas características que los hace diferentes y que, cuando hablamos de gatos domésticos, debemos respetar para asegurarles una vida larga y feliz.
Los gatos tienen una particularidad alimentaria, son carnívoros estrictos, no pueden sobrevivir con una dieta que no sea a base de carne y dependen exclusivamente de los alimentos que nosotros les damos. Por este motivo nutrición del gato puede suponer un reto y a la hora de escoger el alimento, además de la composición que debe ser equilibrada, debemos tener en cuenta aspectos como el sabor, olor y textura. Los gustos de los gatos no son similares al del ser humano (por ejemplo, los gatos no detectan sabores dulces) y varían de un individuo a otro al igual que ocurre en las personas, así que deberemos conocer las preferencias del nuestro para darle una alimentación que le resulte apetecible.
En cuanto a la frecuencia de alimentación, en su estado natural, los gatos cazan pequeñas presas varias veces al día. En la medida de lo posible, se debe respetar esta pauta de alimentación, en lugar de hacer una o dos comidas grandes al día, debemos ofrecer pequeñas cantidades repartidas en varias tomas. Teóricamente los gatos son capaces de racionarse la alimentación y no ingerir más calorías de las que necesitan, pero viviendo como “mascotas” estos mecanismos regulatorios pueden alterarse y de hecho se estima que un 70% de los gatos domésticos europeos sufren de obesidad.
El tipo de comida que se deben proporcionar a un gato son alimentos de alta calidad, para ello no hay que guiarse sólo en lo que dice el paquete o por el precio, debemos buscar consejo veterinario en cuanto a la composición (el equilibrio entre la proteína y la grasa que son la base de una buena dieta felina) y combinar alimentos secos con húmedos.
Los gatos tienen alta necesidad de proteínas por lo que su alimento debe cumplir siempre este requerimiento, además se deben incorporar una serie de aminoácidos vitales que los gatos no son capaces de sintetizar por sí mismos, el más conocido es la taurina.
Debemos evitar alimentar a los gatos con comida para perros ya que esta posee una formulación radicalmente diferente, adecuada a las necesidades de los perros. Aunque un consumo accidental no es peligroso, puede producir graves problemas de salud en los gatos si se suministra habitualmente este tipo de comida.
La grasa va a ser otra parte importante de la dieta pues va a suministrar energía, sirve como transportadora de ciertas sustancias y es una fuente de ácidos grasos esenciales que los gatos no pueden sintetizar a partir de las fuentes vegetales, como hacen los perros o las personas.
Los carbohidratos no son ingredientes clave en la dieta de los gatos, ya que no los aprovechan bien y son de difícil digestión. Estudios recientes demuestran que la formulación adecuada en la alimentación de los gatos domésticos debe tener un mínimo del 52% de proteína y los hidratos de carbono no deben superar un 10-12%.
También debemos prestar atención a la forma en la que servimos la comida a nuestro gato. Los comederos deben ser anchos y poco profundos para evitar que deban meter la cabeza en el mismo y que los bigotes no les choquen contra las paredes y nunca se debe mezclar en un mismo comedero el alimento seco con el húmedo; deben ofrecerse siempre por separado.
En cuanto al agua que beben, debemos vigilar si se produce un consumo adecuado ya que es muy frecuente que este sea deficitario predisponiendo así al animal a sufrir problemas de salud, sobre todo urinarios. Los gatos deben tener siempre a su disposición varios bebederos. A muchos gatos les gusta beber agua fresca y en movimiento, una buena idea es disponer de un bebedero-fuente y renovar frecuentemente el agua.
En la Clínica Veterinaria Son Dureta, tratamos muchos trastornos alimentarios en gatos y sabemos que una dieta específica para cada individuo es la base para la prevención y cura de muchas enfermedades. Nadie mejor que el veterinario para recomendar el mejor alimento para cada caso y seguir la dieta que prescriba hará que nos ahorremos muchos dolores de cabeza, preocupaciones y dinero.
Esa es la razón por la que en la Clínica Veterinaria Son Dureta trabajamos con alimentos escogidos según criterios científicos y diseñados para prevenir muchos problemas de salud. Es de vital importancia saber que existen diferentes alimentos que pueden ayudarnos en las enfermedades o simplemente en la fisiología de nuestro gato y que en cada categoría el veterinario nos aconsejará cual de ellos es el mejor para nuestra mascota.
Algunos ejemplos de alimentos formulados científicamente para diferentes problemas o estadios de vida:
· Obesidad
· Sénior
· Cachorro
· Urinario
· Dermatológico
· Hipoalergénico
